La gestión emocional es un paso imprescindible para sentirte satisfecha con tu vida. Si no aprendes a manejar tus sentimientos, es posible que caigas en alguno de los errores típicos que cometen las personas con baja inteligencia emocional.
Como no quiero que eso te ocurra, te he preparado este artículo con los 5 avances que necesitas seguir para aprender a gestionarlas. He acompañado cada etapa con uno o más artículos que profundizan en el tema.
1. Date el permiso para sentir tus emociones con toda su intensidad
Lo más probable es que no estés acostumbrada a vivir tus sentimientos de forma plena porque, probablemente, no has sido educada para ello.
Por eso, quizá tienes alguno de estos dos problemas: 1) No eres capaz de saber qué sientes o 2) Tus emociones estallan en cualquier momento.
Vivir tus emociones es aceptar que eres vulnerable, reconocer que no eres la mujer (u hombre) fuerte que creías ser. Si quieres progresar en la percepción de tus emociones, profundiza en tu vulnerabilidad.
2. Reconoce cuál es la emoción básica que hay detrás
Las emociones son como los colores: hay unas pocas básicas y el resto son mezclas y remezclas de las primarias.
Si has visto Inside Out de Pixar, son fáciles de recordar. Sólo tienes que evocar sus personajes: alegría, tristeza, asco, miedo, rabia y añadirle la sorpresa. Haz click en el enlace anterior para comprender lo que la película puede enseñarte sobre ti misma.
Cuando identificas la emoción principal que estás viviendo, es más fácil saber cuál es su función en la vida. De esta forma, puedes entender el mensaje que ha venido a traerte. Investiga el significado de las emociones básicas desde aquí.
Si necesitas una herramienta para descubrir tu emoción, puedes probar este ejercicio corporal.
3. Exprésala
Como te he contado otras veces, una emoción callada provoca dolores corporales, ya que tus músculos tienen que tensarse para reprimir la energía que la emoción conlleva. Es decir, tienen que evitar que llores, que te rías, que grites, etc.
Sin embargo, no siempre es posible expresar las emociones. Porque a veces no estamos en el lugar adecuado o no tenemos la confianza necesaria con las personas que nos rodean en ese momento, por darte un par de ejemplos.
Ante esto, es bueno tener una herramienta cerca para poder dar rienda suelta a la expresión emocional. Hacerlo a través del cuerpo, tal como te enseño en esta web, es una opción.
Pero hay otro elemento que puede servirte: la escritura terapéutica. Puedes practicarla en cualquier lugar, con intimidad y seguridad. Aquí tienes 3 ejercicios para dar rienda suelta a tus emociones.
4. Si es una emoción difícil, dale un lugar dentro de ti
Por norma general, catalogamos algunas emociones como negativas, ya que no nos gustan las sensaciones o reacciones que nos provocan. La rabia, la tristeza y el miedo son los sentimientos más reprimidos.
Aún así, no creo que haya emociones negativas, sino difíciles.
Todas son necesarias y, por eso, es bueno darles un lugar dentro de ti: aceptar que estás viviendo esa emoción, aunque no te guste experimentar sus efectos. Investiga más sobre ello con el artículo que te cuenta la magia de las emociones negativas.
Como este puede ser el paso más complicado de todos, además, te dejo 3 post para que tengas recursos ante las emociones más difíciles:
5. Responsabilízate de tu emoción
Algunos artículos sobre gestión emocional, se quedan en la aceptación. Pero a mí me gusta incluir la responsabilidad que tienes en los sentimientos que vives. Porque responsabilizarte de tus emociones, en especial las difíciles, es ir un paso más allá. No sólo las aceptas, sino que tomas las medidas necesarias para integrar su mensaje dentro de tu vida.
Por ejemplo, es necesario reconocer que estás enfadada. ¿Pero qué haces con ese enfado? No sólo se trata de liberar la energía para gritar o golpear, sino que esa rabia te está mostrando algo que necesitas cambiar en tu vida. Cuando te haces responsable, transformas aquello que te molesta.
Las 4 preguntas de Byron Katie son la herramienta que más me ha ayudado a establecer este paso. Aunque el artículo del enlace está enfocado para el enfado, puedes usarla para cualquier emoción. Te muestran cómo lo que sientes ante una situación, en realidad, forma parte de ti. Y si forma parte de ti, es tu responsabilidad.
Estos son los 5 pasos que necesitas seguir para convertirte en una persona feliz, ya que la gestión emocional es imprescindible dentro de una vida plena.
Como muchas cosas, es algo que se aprende con el tiempo. Hasta ahora tú también lo estás haciendo, aunque quizá tu forma no está siendo efectiva o satisfactoria. Aprendiste a manejar tus sentimientos cuando eras pequeña, pero si no te está funcionando, necesitas cambiar esos patrones por otros.
Para ello, toma como referencia estos 5 pasos y trata de cumplirlos a tu manera. Tómate el tiempo que necesites para cada uno de ellos. Equivócate y aprende de tus errores.
Y tú, ¿cómo vives tus emociones? Cuéntame tus trucos y experiencias en los comentarios. Así yo también aprenderé de ti.
4 comentarios en «5 pasos para gestionar tus emociones»
Hola Nuria!
Que post tan enriquecedor y con tanto contenido importantísimo, me encanta la parte de responsabilizarnos de nuestra emoción y sin lugar a dudas es una parte fundamental a la hora de aprender a gestionar nuestras emociones y con ello producir nuestro crecimiento personal. Me encanta como lo has descrito.
Por otro lado muchisimas gracias por incluir un post mío en este pedazo de artículo, voy a leer cada uno de los artículos que enlazas porque seguro que resultan tremendamente enriquecedores.
Un abrazo y enhorabuena
¡Hola, Andrea!
Muchas gracias por tu comentario 🙂 Me alegra mucho que te haya gustado el post.
A mí me gusta mucho tu blog, por eso incluí uno de tus artículos.
Un abrazo!
Hola Nuria,
Me gusta la sencillez con la que te expresas. Comparto del todo tu enfoque. Leyendo el post he recordado lo importante que es reconocer pero también expresar nuestras emociones y como bien dices muchas veces no estamos en el contexto adecuado o lo que es peor, no nos damos permiso para hacerlo y luego nuestro cuerpo se resiente y nos pasa factura.
Así que todas las personas, herramientas y espacios que nos permiten conectar con las emociones y canalizarlas me parecen una bendición.
Gracias por incluirme en tu post.
Un abrazo,
Virginia
¡Hola, Virgina!
Muchas gracias por tu comentario. Al igual que tú, a mí también me parece maravilloso que existan proyectos y personas que nos ayudan a conectar con nuestras emociones. Por eso decidí hacer esta recopilación.
Tu blog me parece fantástico, por eso te mencioné.
Un abrazo.